El Director del Torneo velará por la imparcialidad del juego, esa será su mayor prioridad en el proceso de toma de decisiones durante el Torneo. Las circunstancias inusuales pueden, en ocasiones, llevar al director a obviar o reinterpretar una regla en beneficio de la imparcialidad. Las decisiones del Director del Torneo son finales.

Las fichas de menor rango en el juego deberán ser retiradas de la mesa cuando no sean necesarias en la estructura de ciegas o antes. Todas las fichas de menor valor que puedan ser canjeadas se cambiaran directamente. El método para renovar las fichas extras es repartir una carta a cada jugador por cada ficha extra que posea. Las cartas son repartidas en el sentido de las agujas del reloj comenzando por la plaza 1º. El jugador con la carta más alta obtiene la primera ficha extra para canjearla por la ficha de mayor valor y así sucesivamente. Ningún jugador podrá ser eliminado del Torneo en este proceso, en caso de que un jugador cuente tan solo con una ficha y tras el sorteo no tuviera derecho a recibir ficha, se le concedería una automáticamente.

Las fichas impares o sobrantes al repartir un bote se le entregarán al primer jugador a la izquierda del botón.

Los botes adicionales serán repartidos como un bote único. Los botes no serán mezclados antes de ser divididos.

Una vez pasado un tiempo razonable y habiendo pedido algún jugador “tiempo”, el jugador tendrá un minuto para tomar su decisión, en los últimos diez segundos se le realizará una cuenta atrás en alto, si el jugador continuara sin actuar su mano se considerara muerta.

Durante el transcurso de un Torneo, se aplicará el principio del Botón Muerto: en el caso de que el jugador a quien corresponda esa posición en la próxima mano fuese eliminado el Botón permanecerá en esa posición una mano adicional.

Se puede penalizar a un jugador por mostrar sus cartas cuando la mano no ha finalizado, por tirar cartas fuera de la mesa, por incumplir la norma de un-jugador-por-mano, o por incidentes semejantes. Se penalizará al jugador por “soft play” (ver norma 33), por insultar o por comportamiento inadecuado. Las penalizaciones que podrá imponer el Director del Torneo incluyen avisos verbales y manos o vueltas sin jugar pero pagando las ciegas y los antes. Una penalización de manos sin jugar se contabilizará como sigue: el ofensor se perderá una mano por cada jugador, incluido él mismo, que haya en la mesa en el momento en que se imponga la penalización multiplicado por el número de vueltas sin jugar que determine la penalización. Durante el periodo de la penalización el jugador deberá permanecer alejado de la mesa. El personal del torneo puede imponer una, dos, tres o cuatro vueltas de penalización o la descalificación del jugador. Las fichas del jugador descalificado se retirarán del torneo. Repetidas infracciones pueden suponer penalizaciones mayores.

Todos los jugadores deben de estar en sus asientos asignados antes de que el crupier termine el reparto de las cartas de cada mano. En el caso de que un jugador no esté en su asiento en ese instante, la mano será inmediatamente eliminada.

Todas las cartas de una mano serán mostradas boca arriba siempre que un jugador estuviera restado, una vez que las apuestas se hayan completado.

Si un jugador hace una subida equivalente al 50% de la apuesta anterior, deberá de realizar una subida completa. La subida deberá ser la cantidad mínima permitida para una subida en ese nivel de Torneo. Se considera como incremento mínimo la diferencia entre las dos últimas apuestas realizadas.Una apuesta inferior a un “raise” completo, no reabre las opciones de apuestas para un jugador que ha actuado con anterioridad (No tendrá la opción de “re-subir”).

Cuando un jugador pone una ficha de mayor valor a la apuesta anterior sin hacer ninguna declaración se considera que únicamente está viendo dicha apuesta. Si pone una ficha de mayor valor a la apuesta anterior y anuncia una subida (“raise”) sin especificar la cantidad, se considerará el valor de la ficha como subida. A partir del “flop”, una apuesta inicial con una sola ficha, sin hacer ninguna declaración, se considera el valor de la ficha como apuesta. Para subir una apuesta (“raise”) con una ficha de mayor valor será necesario anunciarlo antes de que la ficha toque el tapete.

Los jugadores están obligados a proteger al resto de jugadores en todo momento. Por lo tanto, los jugadores, tanto si están en la mano como si no, no pueden: 

1. Revelar el contenido de cartas en juego ni eliminadas.

2. Dar consejos ni criticar una jugada hasta que la mano haya finalizado.

3. Leer una mano que no ha sido expuesta en la mesa.

La norma de un jugador por mano, será respetada y hecha valer.

La asignación de puestos (número de mesa y asiento) será determinada al azar, siendo final e intransferible.

La norma de “solo-inglés” se aplicará en Estados Unidos durante el transcurso de las manos. El inglés se utilizará en torneos internacionales junto con el idioma oficial del lugar.

Los jugadores no pueden utilizar teléfonos ni ningún tipo de dispositivo de comunicación en la mesa. El jugador que desee utilizar el teléfono móvil, deberá abandonar la zona de Torneo.

El cambio de baraja se realizará por iniciativa del crupier, en un nivel determinado o como establezca el establecimiento. Los jugadores no pueden pedir que se cambie la baraja.

Cuando el tiempo de un nivel de apuestas se termina, y se anuncian las nuevas ciegas, las mismas se aplicaran en la mano siguiente. Se considera que una mano está iniciada cuando el crupier comienza a barajar.

Un jugador no puede eludir una mano. Si un jugador declara su intención de reponerse antes de que empiece una mano, ese jugador está jugando con esas fichas y se le obligará a hacer la reposición.

Los jugadores deben mantener las fichas de mayor valor visibles en todo momento.

Declaraciones verbales sobre el contenido de una mano por el propio jugador no son vinculantes; no obstante, un jugador que deliberadamente anuncia su jugada erróneamente puede ser penalizado.

El “Rabbit Hunting” no está permitido. Si una mano terminase antes de mostrar las cartas comunes, en ningún caso se mostrarán los naipes que hubieran quedado en el mazo.

Un jugador que intencionadamente evite las apuestas obligatorias (ciegas o antes), al ser trasladado de una mesa rota, podrá ser objeto de penalización.

Todas las fichas deben estar a la vista siempre. Los jugadores no pueden coger ni transportar fichas del torneo de ninguna manera que las aparte de la vista. El jugador que actúe de este modo perderá las fichas y se enfrentará a una descalificación. Las fichas perdidas por esta norma serán eliminadas del torneo.

Los jugadores que vayan a una mesa, después de haberse cerrado la suya, asumen los derechos y obligaciones de su nueva posición. Pueden ser ciega grande, ciega pequeña o botón. No podrán entrar a jugar la mano SÓLO si entran en la posición o posiciones entre el Botón y la pequeña ciega.

Se procurará en todo momento que las mesas tengan el mismo número de jugadores, en caso de necesidad el jugador elegido para moverse será el que ocupe la posición de gran ciega y se le colocara en la nueva mesa en la posición más próxima a la misma. La mesa de la que un jugador será trasladado se designará por un procedimiento predeterminado. El juego se detendrá en una mesa en la que falten tres o más jugadores.

El número de subidas no está limitado en juegos “no-limit”. Una subida tiene que ser, como mínimo, equivalente a la subida anterior.

Si durante el transcurso del reparto, el croupier gira total o parcialmente un naipe dirigido a un jugador, el reparto continuará normalmente, se anunciará “carta vista” y al finalizar el reparto se le lanzará una nueva carta al jugador en cuestión. La carta vista se enseñará a todos los jugadores y se colocará encima del mazo de cartas para ser la primera carta quemada.Será mano nula si se gira una de las dos primeras cartas que se reparten (ciega pequeña o ciega grande). Los jugadores pueden recibir dos cartas consecutivas en el botón.

Es responsabilidad del jugador proteger sus cartas en todo momento. Si el crupier elimina una mano desprotegida, no se podrá rectificar y el jugador no tendrá derecho a compensación, solo si hubiera subido la apuesta y ningún jugador la hubiera igualado o incrementado aun, le será devuelta la cantidad incrementada.

El crupier no puede eliminar una mano ganadora que se ha expuesto en la mesa y que era la mano ganadora de forma evidente. Se anima a los jugadores a que ayuden en la lectura de las manos expuestas en la mesa si detectan que se va a cometer un error.

Las declaraciones verbales realizadas por un jugador en el momento de su turno de actuación serán obligatorias y tendrán valor. Las actuaciones a destiempo podrán comprometerle y ser obligatorias:

a. Si un jugador apuesta, sube o paga una apuesta anterior fuera de su turno, ese movimiento se mantiene.

b.Si el jugador que debió haber actuado anteriormente, decide apostar por una cuantía mayor a la establecida por el jugador que actuó fuera de turno, este último podrá, completar la apuesta, retirar su apuesta y tirar sus cartas o bien incrementar.

El jugador que muestra sus cartas durante el juego puede ser penalizado pero su mano no será anulada. Las cartas no deben enseñarse durante el transcurso de la partida. La penalización se aplicará en la siguiente mano.

En juegos “no-limit” y “pot-limit” las subidas se tienen que hacer: 

1. Poniendo el valor o la cantidad de fichas en un solo movimiento.

2. Anunciando previamente la cantidad total de la apuesta.

3. Anunciando “raise” previo a igualar la apuesta anterior, y después completar la acción en un movimiento adicional.

El póker es un juego individual. El “Soft Play” (no actuar contra determinados jugadores por amistad, por interés, por ser familia…) será penalizado incluso con la perdida de fichas y/o la descalificación. “Chip dumping” (pasar fichas a otro jugador mediante apuestas) se penalizará con la descalificación.

Los jugadores tienen derecho a saber cuánto hay en el bote sólo en juegos “pot-limit”. El crupier no contará el bote en juegos con límite y sin límite.

En el uno contra uno la ciega pequeña es botón y actúa primero. Al inicio del uno contra uno puede ser necesario reajustar la posición del botón, para evitar que un jugador ponga la ciega grande dos veces seguidas.

Repetidas faltas de comportamiento, como tocar innecesariamente las fichas o las cartas de otros jugadores, demoras en el juego y hablar en exceso, pueden ser penalizadas. El orden y el turno de hablar se respetarán escrupulosamente.

Al finalizar la última ronda de apuestas, el jugador que realizó la última acción agresiva en ésa ronda de apuestas, debe mostrar sus cartas primero. Si no hubo apuestas en el River enseña primero sus cartas el jugador a la izquierda del botón, y a continuación el resto de los jugadores, siguiendo el sentido de las agujas del reloj.

Los jugadores tienen que permanecer en la mesa si todavía tienen acción pendiente en una mano.

El crupier será responsable de aceptar apuestas en dos tiempos.

El jugador tiene que enseñar las dos cartas, cuando juega con las cartas de la mesa, para cobrar su parte del bote.